jueves, 10 de julio de 2008

Miniaturización: El límite está en nuestras manos!

Cada día vemos con asombro como el tamaño de equipos viene disminuyendo considerablemente, y no solo eso, sino que junto con esta disminución aumentan considerablemente su capacidad y versatilidad (Llamemos equipos a teléfonos, unidades de almacenamiento, equipos de computación, dispositivos electrónicos, etc).

¿Tendrá límites el proceso de miniaturización?

¿Hasta dónde pueden disminuir el tamaño de los equipos?

Por ahora el límite somos nosotros mismos, principalmente nuestro cuerpo, y las limitaciones motoras que tenemos para manipular objetos muy pequeños.

Un ejemplo clásico y palpable lo tenemos en la evolución de la telefonía celular, desde los llamados “bloques o ladrillos”, magistrales y mayúsculos teléfonos que le tumbaban los pantalones a cualquiera, hasta los diminutos y casi inmanejables teléfonos actuales, que a parte de ser pequeños, poseen una capacidad envidiable y una utilidad mejor, incorporando cámaras con resoluciones a la par de las mejores cámaras digitales actuales, conectividad en todo momento a internet, y un sin fin de aplicaciones que lo convierten en un potente minicomputador.

El límite de tamaño está en nuestras manos, literalmente hablando, porque ya se observan modelos que la gente rechaza, por encontrarlos incómodos a la hora de utilizar el teclado, con teclas diminutas en las cuales es casi imposibles pulsarlas sin oprimir las teclas vecinas, y que por razones de versatilidad no pueden disminuir más, pero si crecer en funcionalidad.










Otro ejemplo lo tenemos en las actuales memorias USB, o los famosos Pen Drives, dispositivos que cada día aumentan y duplican su capacidad de almacenamiento, y hoy día existen modelos cuyo dispositivo es menor en tamaño al conector USB que contiene en la punta para la conexión. Está llegando el momento en que será como llevar un diminuto objeto que fácilmente se puede extraviar. En la foto un dispositivo usb bluetooth, donde el dispositivo es más pequeño que el conector.








Otro ejemplo son los laptops, que cada día vienen con inimaginables funcionalidades, una capacidad de almacenamiento increíble, una conectividad a la red cada vez mayor, pero mucho más pequeños y livianos. Sin embargo, su principal limitante son la cantid

ad de teclas que deben tener, y como son nuestras manos las que deben utilizarlas, ya hay teclados incómodos por tener las teclas amontonadas, en donde es difícil apretar una de ellas sin hacerlo junto con sus vecinas.

Por ahora los equipos siguen disminuyendo en tamaño, pero aumentando su capacidad y versatilidad, solo nos queda esperar para ver cuáles son los límites del proceso de miniaturización...

Abajo vemos un procesador de computador pasando por hueco de una aguja, inmanejable para nosotros...











Yo creo que el límite está en nuestras manos... Definitivamente es así...